Vanderbrook no tiene ni alchol ni signos de violencia

Hace pocos días, el ciclista Frank Vandenbroucke había muerto. Ya lo han hecho la autopsia, y ha dado que no tiene ni alcohol ni signos de violencia.

El forense Isidore Boye del hospital de Dakar, donde se efectuó el miércoles la autopsia, ha confirmado además que en el cuerpo no se ha hallado ningún rastro que pueda llevar a pensar en un acto de violencia como causa de su muerte. Boye ha precisado, no obstante, que sí ha descubierto lesiones que pueden explicar su fallecimiento, aunque no ha aclarado de qué tipo. Será la investigación judicial la encargada de determinar si las causas que han desencadenado esas lesiones son de orden natural o no, según informa Belga.

Las muestras viajarán seguramente a Europa, a Bélgia o Francia, para ver si hay algo toxicológico.

Mientras que el diario De Morgen aseguraba que en la habitación del hotel se habían hallado somníferos, ansiolíticos e insulina, la televisión había dicho que había pasado las últimas horas con una mujer, que le habría visto desmayarse.

Este ciclista fue una de las promesas, y poco después de pasar, ya estaba con el doping y problemas con las drogas. En la próxima temporada iba a volver a competir, y ya tenía algo con el Fuji.